El multimillonario Elon Musk anunció la decisión de no concretar la compra de Twitter, argumentando opacidad de la red social en lo relativo a las cuentas falsas.
La transacción implicaba un desembolso de 44 mil millones de dólares estadounidenses. Sin embargo, el retiro de la oferta abre la puerta a una batalla jurídica por incumplimiento del acuerdo de compra-venta.
Uno de los escenarios apunta a que Musk deba pagar mil millones de dólares como sanción; otra posibilidad es que, tras una demanda, se le obligue a concretar la compra.
Este día, tras el anuncio, las acciones de Twitter descendieron 7 por ciento.